En un hito trascendental para la biodiversidad y la justicia ambiental, los países miembros de la Conferencia de las Partes (COP16), que terminó este viernes 01 de noviembre en Cali, adoptaron una decisión que reconoce el papel crucial que desempeñan los afrodescendientes, a partir de sus esfuerzos y acciones, en la conservación de la biodiversidad y en la aplicación del Convenio de Diversidad Biológica (CDB) en algunos países, con contribuciones positivas a nivel mundial.
Esta histórica decisión fue resultado de un compromiso de país liderado por la vicepresidenta y ministra de Igualdad y Equidad, Francia Elena Márquez Mina, quien, acompañada por la Ministra de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible, Susana Muhamad, y el Canciller, Luis Gilberto Murillo en alianza con Brasil, impulsaron esta iniciativa.
En su decisión, la COP alienta a las partes a facilitar la participación plena y efectiva de los afrodescendientes en la aplicación del Convenio y del Marco, y a colaborar con ellos para proteger y promover sus prácticas, innovaciones y conocimientos compartidos que apoyan la conservación y la utilización sostenible de la diversidad biológica.
En la decisión adoptada por la plenaria de la Conferencia, se invita igualmente a las partes, a otros gobiernos y a las organizaciones pertinentes a que, con carácter voluntario, consideren la posibilidad de prestar apoyo financiero y mejorar la creación de capacidad para proteger las prácticas, las innovaciones y los conocimientos compartidos de los afrodescendientes.
Asimismo, se hace un llamado a que, según proceda y con sujeción a la legislación y las circunstancias de cada país, se comuniquen a través de sus informes nacionales las contribuciones de los afrodescendientes para información de los órganos subsidiarios y se pide a la Secretaría Ejecutiva de la COP que recopile la información presentada y la ponga a disposición a través del mecanismo de facilitación.
Para la vicepresidenta y ministra de Igualdad y Equidad, Francia Elena Márquez Mina, se trata de un primer paso en la búsqueda de la justicia étnico-racial que durante tantos años les ha sido negada y el comenzar a cerrar las brechas de inequidad y desigualdad profunda en el que viven aún los Pueblos Afrodescendientes, pese a ser fundamentales “para que la estrategia de conservación de la biodiversidad del planeta esté completa”.
Solo en América Latina y el Caribe, la población afrodescendiente suma más de 154 millones de personas, quienes ocupan más de 205 millones de hectáreas, todas ellas ubicadas en ecosistemas de biodiversidad. Esta aprobación en el marco de la COP16 en Cali implica es un primer paso para comenzar a trabajar en los mecanismos de seguimiento e implementación de lo reconocido y de cara a su aplicación ante todos los demás organismos e instrumentos que tiene las Naciones Unidas, no solo en términos ambientales.