Con la edad, las células de nuestro cuerpo pueden experimentar un estado en el que dejan de crecer al que se le llama senescencia y aunque detienen su crecimiento, estas células continúan liberando moléculas inflamatorias que degradan los tejidos. Cuando una persona es joven, el sistema inmunitario responde y elimina las células senescentes también llamadas zombis. Sin embargo, las células zombis persisten y contribuyen a varios problemas de salud y enfermedades que se asocian con la edad.
En los últimos años, este proceso de las células se ha venido estudiando con la intención de encontrar medicamentos que ayuden a eliminar las células zombis en los tejidos, lo que se traduce en un proceso antienvejecimiento.
¿Por qué se crean los productos antienvejecimiento?
La intención que tienen estos medicamentos llamados senolíticos es matar selectivamente las células zombis sin afectar las sanas lo que beneficiaría a las mujeres mayores sanas pero que no puede ser usado como un medicamento estandarizado, de acuerdo con dos estudios realizados por investigadores de Mayo Clinic.
¿Por qué pueden ser nocivos los productos antienvejecimiento?
“Nuestros hallazgos argumentan en contra de lo que muchas personas ya están haciendo al utilizar productos comerciales como la quercetina o compuestos relacionados como la fisetina que pueden exhibir algunas propiedades senolíticas (matar las células zombis). Las personas los están utilizando como agentes antienvejecimiento sin saber si tienen números de células senescentes suficientes para que puedan beneficiarse de ellos, o qué dosis o régimen de dosificación es necesario para que estos productos o dosis sean efectivos y seguros”, dice el autor principal, el Dr. Sundeep Khosla, endocrinólogo de Mayo Clinic en Rochester, Minnesota.
Productos como estos ya se comercializan en Colombia en presentación de suplementos y se accede a ellos sin necesidad de fórmula médica.
El endocrinólogo de Mayo Clinic explica que se necesita más investigación para identificar mejor a las personas que pueden beneficiarse de los tratamientos senolíticos y desarrollar medicamentos senolíticos más específicos y potentes que puedan ser eficaces en más personas.
“Las personas que han experimentado un envejecimiento acelerado como los sobrevivientes de cáncer después de la quimioterapia, o aquellos con síndromes progeroides (enfermedades poco frecuentes que causan envejecimiento prematuro y acortan la esperanza de vida), éstas personas pueden tener un aumento en el número de células senescentes y allí si serían efectivos estos medicamentos.
Además de sus aplicaciones contra el envejecimiento, los medicamentos senolíticos pueden ser útiles contra ciertas enfermedades, como la fibrosis pulmonar idiopática, la demencia, la diabetes, las enfermedades cardíacas, entre otras. Sin embargo, es probable que estos medicamentos deban personalizarse de acuerdo con su potencia y la cantidad de células senescentes presentes en los tejidos afectados.